Winter is coming… Y con el invierno se abre la veda para los amantes del esquí y el snowboard. Nuevos esquíes, nuevas botas, nueva tabla, nueva equipación en definitiva y una duda en el aire, ¿dónde esquío este año? En España podrás encontrar buenas pistas, pero si tienes ganas de probar un nuevo destino de nieve, hay lugares especialmente recomendables para que te lances, como es el caso de Bansko en Bulgaria, Sapporo en Japón o Sochi en Rusia.

Es precisamente a Sochi a donde vamos a viajar hoy. Un destino conocido como “la perla de la Riviera rusa” repleto de balnearios, bellísimos paisajes y rincones a descubrir.

Esquiar en la Montaña de los Reyes

Para los que no la conocieran ya, Sochi saltó a la fama internacional de la mano de las Olimpiadas de Invierno de 2014. Precisamente por la cercanía del evento, la conocida estación de esquí Krasnaya Polyana dispone de unas instalaciones especialmente adecuadas para la práctica de deportes de invierno. Si además cuentas con las montañas del Cáucaso, como telón de fondo, la experiencia es simplemente irresistible.

Krasnaya Polyana, también conocida como La Montaña de los Reyes, era el lugar favorito el zar Nicolás II para sus vacaciones estivales. También del actual presidente ruso, Vladimir Putin, que suele ir en helicóptero desde su propia residencia. Y, por supuesto, para miles de personas que cada año eligen este destino de nieve para la práctica del esquí.

Y es que Krasnaya Polyana se sitúa entre las diez mejores estaciones del mundo en caída vertical y sus pistas, con diferentes grados de complejidad, son aptas tanto para profesionales como para principiantes. Su tiempo estable, su cielo limpio y azul, los bosques de abedules que jalonan las pistas y la oferta de ocio de Sochi y las ciudades limítrofes, suman aún más valor a su ya de por sí gran atractivo.

El entorno es tan hermoso que, además de disfrutar del paisaje practicando el deporte rey del invierno, es muy recomendable recorrer la zona en helicóptero para disfrutar de las privilegiadas vistas que nos regalan sus glaciares, montañas y bosques.

Sochi, un destino de nieve y mucho más

Además de hacer las delicias de los aficionados a la nieve y aunque pueda parecer contradictorio, Sochi es famosa por su clima templado, que permite nadar en las cálidas aguas del Mar Negro hasta bien entrado octubre.

Pero no sólo tiene hermosas playas, su Parque Natural alberga lugares realmente únicos ideales para practicar trekking. En este sentido, te recomendamos subir a la torre que hay en la cima de Ajun (la montaña más alta de la zona) por su famosa escalera en espiral. Disfrutarás de unas vistas inmejorables al mar, a la cordillera del Cáucaso y a la propia ciudad. Y por supuesto, visitar de camino el jardín botánico más grande de Rusia, el Arboreto o Arboretum, que reúne alrededor de 1800 especies distintas procedentes de todos los continentes.

La visita al Parque la puedes completar recorriendo las cuevas de Vorontsovskaya y Ajshtyrskaya, repletas de estalacticas y estalagmitas e incluso acercándote a alguna de las casas de té situadas entre Loo y Dagomys, en el pueblo de Uch Deren, en plena montaña. Allí podrás tomar una taza de té ruso, el más septentrional del mundo.

La naturaleza, un atractivo más de Sochi

Sin duda, la naturaleza es uno de los grandes atractivos de Sochi, por ello la visita a las Cascadas de Agura, también conocidas como Agursky, es casi obligatoria. Estas cascadas nacen como consecuencia del paso del río Agura en la cordillera de Alek a más de 1000 metros sobre el nivel del mar. Destino favorito de los excursionistas, cuentan con una caída de unos 30 metros y una ubicación que permite deleitarse con espectaculares panorámicas de la ciudad y del Mar Negro.

Volviendo a Sochi y si te gusta la botánica, te recomendamos visitar el jardín botánico de Dendrary, en pleno centro. Tiene plantas y árboles únicos en todo el mundo como palmeras, bambú o robles y en sus estanques se pueden observar distintas especies de plantas acuáticas como papiros o nenúfares. Supone un verdadero oasis verde en medio de la ciudad.

Y por supuesto, puedes culminar tu estancia visitando alguno de los numerosos balnearios de la zona, como el de Matsesta, donde sus aguas minerales te dejarán como nuevo.

Sólo te queda decidirte. Si quieres un destino que aúne deporte y naturaleza, Sochi es tu opción. Despreocúpate de todo y cuéntanos qué te apetece hacer. En Bhárad, confeccionamos tu viaje a medida para que sólo te ocupes de tu equipaje.

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-Las impresionantes vistas del Cáucaso mientras esquiabas
-Tu foto junto a las cascadas de Agura
-El té ruso que te bebiste en plena montaña, el más septentrional del mundo
-Esa escalera interminable en espiral que te llevó a la cima de Ajun y las increíbles vistas que pudiste disfrutar luego
-Las innumerables plantas que viste en el Arboreto
-Las aguas termales que tomaste en el balneario y lo bien que te sentiste después